Robert Kirkman es el guionista del momento. Calculo que
mientras cuenta los billetes que le llueven de su serie Walking Dead (los de él
y los de Tony Moore que esta que trina) sigue escribiendo para Image, sacándose
alguna que otra mini de la galera mientras continua los sufrimientos de sus
protagonistas en el mundo de los zombis, o bien expandiendo las fronteras de Invencible,
quizás su obra maestra (si me lo preguntan).
Además se saca algunas miniseries y colaboraciones como
Haunt con Capullo, Spawn, o por ejemplo The Infinite con Rob Lifield.
Estas series son todas de resultados irregulares, y no
llegan a la perfección y la potencia de sus series de cabecera. Y es que a diferencia de otros autores, a Kirkman lo
que no se le da bien es el inicio.
En la estructura del relato clásica (INTRODUCCION – NUDO –
DECENLACE) no todos son virtuosos. Hay autores que se les da muy bien el inicio
y no llegan a un buen nudo. Por ejemplo Naoki Urasawa es muy bueno en el nudo
pero no se caracteriza por sus finales, que tienden a ser demasiado largos, o a
veces crÃpticos.
En nuestra región Pampeana, Carlos Trillo reconoció mas de
una vez que lo suyo era el principio, pero que era muy malo para los finales y
remates, y es por eso que tiene tantas colaboraciones con Maicas que es un
experto del remate.
Ejemplos sobran, y como decÃamos a Kirkman le va la narración
descomprimida. Hay que dejarlo andar uno o dos arcos para que el muchacho tome
vuelo. Es lo que pasa con Invencible por ejemplo, que se consagra con el tercer
tomo y desde ahà viene arrastrándonos en una montaña rusa infinita.
Sumado a que quizás este haciendo demasiados trabajos en
paralelo y hace que algunas de sus series no sean todo lo buenas que debieran.
Pero este no es el caso de Science Dog.
Desde muchos puntos, es una historia atÃpica. Por un lado es
un personaje de ficción dentro de ficción. En la mencionada Invencible, el
protagonista es un joven superhéroe con poderes, que lee comics e incluso tiene
un personaje favorito: Science Dog, especie de Tom Strong Perruno que hace de superhéroe
tecnológico/pulp.
Nombrado a lo largo de la serie central, ha tenido pequeñas
tiras y apariciones, pero nunca dejaba de ser un personaje de ficción en el
mundo de ficción que nosotros presenciamos.
Sin embargo Kirkman con Corey Walker se ha arremangado y ha
sacado una novelita grafica que recopila en continuidad algunas historias
cortas del personaje y las sumerge en una trama central.
Aquà otro punto atÃpico por parte de Kirkman. Es una novela
grafica limitada, y sin embargo se las ingenia para hacer una historia
atractiva, con viajes en el tiempo, batallas en imperios espaciales,
archienemigos y contar el origen secreto todo en 64 paginas! Y además no hace
falta conocer nada de este personaje, ya que el unitario esta pensado para ser
disfrutado y entendido en si mismo.
En el apartado
grafico, el arte de Cory Walker es excelente, alcanzando el equilibrio justo
entre la sÃntesis y el detalle, dotando a la tira de un dinamismo pocas veces
visto. Estamos hablando de crear todo un universo nuevo, con personajes,
trajes, armas por tan solo cincuenta y pico de páginas con algunos extras.
La única contra (y eso hay que decirlo) es que hasta la
fecha solo existe una edición preciosa, oversized tamaño Deluxe que cuesta 20 dólares,
un poco caro para la cantidad de contenido, pero si sos fanático de Invencible,
este comic es una perlita que no puede
faltar en tu biblioteca.