
La puerta de Arkham se abre como la boca del cancerbero, y de allí se puede sentir el vaho de la locura, el insano aliento de las mentes mas retorcidas del mundo que languidecen encerradas tras los muros, a la espera... y abriéndose paso entre los vapores siniestros aparece el Guasón, una vez mas, de vuelta en las calles.
Ayer termine de leer la nueva novela gráfica de DC, titulada simplemente Joker. Guionizada por Brian Azzarello (100 balas, Batman, y otros tantos clásicos) y con arte de Lee Bermejo (imitador avezado de Bradstreet, que ha logrado su estilo único).

¿Que se puede decir? Lo primero que se ve es que aprovechando la ultima peli de Batman, la historia bien podría ser una secuela. El Guasón aparece, caracterizado como en la película, con esa sonrisa que es una cicatriz indeleble, una burla al mundo. Sin embargo la historia incorpora al resto del panteón de villanos, en modo "realista".
La historia por lo tanto poco tiene que ver con el mundo de Batman, con la continuidad de Morrison, e incluso poco y nada con la linea de las ultimas películas. Es un coctel de todo, explosivo y expectacular.
Justamente lo que se dice de la ultima película, que en realidad es una peli destinada al personaje de Heather Ledger mas que una de Batman. Y aquí se le hace justicia, con un especial de 120 pico de paginas de maldad y locura.

Estan todos, Killer Croc como un negro cabrón, Dos Caras que no se decide si es aliado o enemigo, e incluso el Acertijo, con un aire a Johny Depp (lo escribí bien esta vez).
Tambien aparece una Harley Queen ardiente, y lo mas importante de todo es que los disfraces se dejan de lado, como pequeños rasgos distintivos. El guión de Azzarello justamente se encarga de eso, de mostrarnos como el Guasón desencadena una oleada de terror en el bajo fondo de Gotham, como a los codazos entre el pingüino y dos caras se hace de un lugar. Y lo mas escalofriante es que el Joker esta suelto sin limites, no lo importa el poder o la gloria o las drogas.

Esta novela gráfica es una radiografia de este Joker que ya queda lejos de lo pintoresco, y se adentra en los terrenos oscuros de la depravacion. Quizás esto le saca un poco de fuerza que si tenia la Broma asesina, ya que no es una historia de Batman contada para adultos, es lisa y llanamente una historia para adultos.
En lo que hace al arte, Lee Bermejo nos presenta un dibujo realista, por momentos cinematográfico, por momentos solo lineas, como si la realidad misma se sometiera a la locura.
El protagonista sin embargo es un tal Johnny Frost, que entre el espanto y la admiracion acompaña el raid delictivo del Joker. Este narrador infortunada comprende la leccion demasiado tarde, "no hay cura para el Joker... solo Batman"