COMICS CONOSUR: la vuelta del comic a la Argentina


Seguimos con la dilatada entrevista a Pablo Muñoz, que esta vez nos habla de todo lo referido a Comics Conosur y su tarea como coordinador de la primera coleccion de la historieta de clarin.

Para muchos esta es, fue y quizas sea la mejor etapa de su carrera a lo largo de estos 20 años. Pablo Muñoz , para los que no lo sepan es el CEO de Deux Graphica, editorial que tiene en su haber la nueva edicion de cazador, Astroboy y otras tantas.

¿Como fue que surgió la idea de CCS? Fue un momento clave del país, estaba todo torcido, nadie sabia hacia donde estaba yendo la cosa (muy parecido a ahora) ¡¡y vos te saliste a editar Marvel en la Argentina !!!

Mirá, como te contaba venía todo complicado. Además por ese entonces y en medio de mi peor período de inestabilidad ¡me casaba! (por segunda vez).

Intentando armar el proyecto de Deux en torno a ser un estudio generador de contenidos para el exterior (en mayor medida venta de historietas terminadas y en menor agente de autores) tuve varias reuniones con Diego Barassi, un joven ejecutivo de licencias de la empresa EXIM. En una de esas charlas Diego me planteó que Exim estaba representando por ese entonces a Marvel en todo lo referente a merchandising para Latinoamérica, así como a Panini en varios ítems. Dado que yo había sido el editor de los anteriores procesos de los comics Marvel en el país, ¿por qué no intentábamos relanzar la línea? Diego se reunió en Italia con Marco Lupoi, el responsable de todo Panini comics mundial, le planteó su interés por editar los comics en Argentina (la licencia con Planeta para sudamérica había caducado) y Marco le dio el visto bueno sugiriéndole en esa reunión que le propusiera a un conocido que él tenía en Argentina, sumarse al proyecto dada su experiencia como editor de comics de Marvel.

Obviamente era yo. Diego volvió exultante con todo cerrado. Claro que faltaba lo principa, ¡quién ponía la plata para imprimir y pagar arte y licencia! Allí surgió el hermano de Diego, Hernán, como inversor.

Por lo que CCS nació como un triunvirato: Diego Barassi, editor responsable aportaba el ok de Panini y negociaba cada tema con ellos, Hernán Barassi, director comercial era el inversor del negocio y el contralor de cobranzas, y yo era el director editorial a cargo de decidir qué se editaba y coordinar todos los procesos de edición. La verdad es que fue una empresa a pulmón, y dado que Diego por su trabajo en Exim viajaba constantemente (y por ese entonces directamente pasó a residir en México), Hernán y yo nos repartíamos todas las tareas. Hernán se encargaba de llevar revistas a las distribuidoras y yo armaba todas la notas y letreaba todos los comics. El único colaborador estable era Tomás Krenn desde las traducciones. Más allá de estas limitaciones estoy convencido que se hizo un trabajo excelente. Nadie creía por ese entonces en una edición local de comics americanos. Y demostramos lo contrario.

¿Que alcance regional tuvo? ¿Se llego a comercializar realmente en todo el Cono Sur?

La licencia nos habilitaba, además de Argentina, a vender en Chile, Uruguay, Paraguay y Bolivia. Más allá de ventas puntuales el único territorio que mereció una circulación efectiva fue Chile. Y así se hizo primero con Panini Chile y luego con Norberto Dorfler, un distribuidor y dueño de comiquerías.

¿Cual era el Comic que mas vendía? ¿Cual es la edición que te hizo sentir mas orgulloso?

Spider-Man y X-Men eran los que más vendían. De hecho las películas de Spider-Man generaron que terminara superando a los muties. Pero hasta el último título terminó vendiendo aceptablemente.

En cuanto a orgullo, creo que el especial de tapa negra de Spider-Man, las miniseries Origins y Banner y los libros de 1602 fueron las ediciones más redondas. Pero haber editado a los mutantes de Morrison y al trepamuros de Straczinsky no tiene precio.

¿Que paso después? ¿Porque te fuiste?

Durante los dos años y monedas de existencia se realizaron dos reuniones anuales de balance.
En la primera todas eran rosas. En la segunda, y de forma sorpresiva, Diego vino al país con un planteo que tenía un solo objetivo, no dividir más por tres sino por dos. En base a una supuesta reestructuración querían replantear la sociedad, de hecho quería que la sociedad fuera unicamente la legal (compuesta por los hermanos) y no la acordada originalmente. Ya tenían un diseñador para reemplazarme y le habían propuesto a Tomás ocupar mi lugar de dirección editorial. Las cosas derivaron en legales y un arreglo final dos años después.

Lo que sucedió es que toda esa movida en torno a tener Marvel con menos personas en la conducción murió a los dos meses cuando Panini no les renovó el contrato ya que decidió continuar con la modalidad que venía implementando en todo el mundo de editar ellos mismos sus productos. Como Argentina era muy chica, luego de un primer intento terminaron trayendo la edición española. La edición de CCS siguió por algunos meses más porque quedaba material del contrato anterior sin haber salido, pero sólo fue una inercia. Yo me fui un 28 de diciembre y para febrero siguiente se había terminado la licencia.

Para todos aquellos que quieran leer mas, puede ver la entrevista completa que le realizo en exclusiva Tinta de Historieta en los siguientes links: